La proyección de necesidades humanas sostenidas en la cotidianeidad urbana

Definida como prácticas que se intercambian en las relaciones sociales y se constituyen en el espacio relacional, conforma un horizonte de posibilidades para crear acciones de sentido colectivo que aspiran a conciliar los opuestos que fundan históricamente el conocimiento y la experiencia social, la...

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Detalles Bibliográficos
Autor principal: Del Valle, Nora
Formato: Objeto de conferencia
Lenguaje:Español
Publicado: 2012
Materias:
Acceso en línea:http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/40548
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Descripción
Sumario:Definida como prácticas que se intercambian en las relaciones sociales y se constituyen en el espacio relacional, conforma un horizonte de posibilidades para crear acciones de sentido colectivo que aspiran a conciliar los opuestos que fundan históricamente el conocimiento y la experiencia social, la vida cotidiana urbana permite abordar la reproducción de actividades productivas. Los proyectos, individuales o colectivos, pueden entrar en conflicto pese a lo cual, sé vive y construye en común Aunque, otra posibilidad compensa el rol de escenario de la reproducción social. Para llevar a cabo los propósitos que estimulan la satisfacción de las necesidades, el hombre produce mediante la praxis la acción social común por la que el mundo se hace una realidad, posible en tanto sea modificada por la aparición de un conflicto que, se entiende como la enunciación de la construcción dialéctica y que puede manifestarse comprometiendo ciertos fundamentos de superación. El marco espacial urbano así definido no es arbitrario, confirma una referencia simbólica que diferencia a un espacio urbano determinado de otro. En ese contexto se observan procesos que contribuyen al estancamiento social Esta condición promueve pensar que el rol del sujeto ha sido distorsionado en la practica urbana respecto de su carácter de usuario de la producción .Efectivamente, ya objetivada la vida cotidiana del sujeto urbano moderno se presenta, establecida por un orden de objetos que han sido elegidos antes de que el individuo apareciese en escena. Aun soterrados los procesos innovativos de la sociedad crean las condiciones que hacen surgir nuevas formas de acceder a la satisfacción de las necesidades humanas. Nuevas condiciones surgidas de la dialéctica social que son recurrentes respecto de las necesidades generan nuevas necesidades y las reproducen promoviendo una nueva estructura de necesidades que posibilitan una alternativa social real generalizable en el devenir. Actualmente, frente al cambio tecnológico es imposible hablar de neutralidad en el proceso, incluyendo la decisión que origina la innovación porque la reproducción del capital se ocasiona entre las cualidades beneficiosas de las innovaciones y la condición del mercado que establece la viabilidad mercantil del producto. La competencia que estimula el cambio tecnológico dificulta cíclicamente su aprovechamiento El colectivo afectado recurre a formas organizacionales para arbitrar los medios para satisfacer las necesidades Entonces la proyección de necesidades humanas sostenidas en la cotidianeidad argumentadas por las innovaciones, se suscriben a las innovaciones sociales instrumentadas por el colectivo que consolida su capacidad de cambio.