Ontogenia craneofacial en europeos y africanos subsaharianos

Las poblaciones humanas se diferencian por numerosos rasgos de su morfología craneofacial. Es aceptado que muchos de esos rasgos se generan tempranamente en la ontogenia; sin embargo, no ha sido demostrado que las características que distinguen a los adultos ya estén presentes durante los primeros a...

Descripción completa

Guardado en:
Detalles Bibliográficos
Autor principal: Sardi, Marina Laura
Formato: Objeto de conferencia Resumen
Lenguaje:Español
Publicado: 2009
Materias:
Acceso en línea:http://sedici.unlp.edu.ar/handle/10915/15985
Aporte de:
Descripción
Sumario:Las poblaciones humanas se diferencian por numerosos rasgos de su morfología craneofacial. Es aceptado que muchos de esos rasgos se generan tempranamente en la ontogenia; sin embargo, no ha sido demostrado que las características que distinguen a los adultos ya estén presentes durante los primeros años de vida. El objetivo de este estudio es analizar las trayectorias ontogénicas (cambios de tamaño y forma respecto de la edad) craneofaciales en europeos y africanos subsaharianos. Considerando estudios previos, se ponen a prueba dos hipótesis: 1) la diferenciación entre poblaciones está presente en etapas tempranas de la ontogenia postnatal; 2) las trayectorias ontogénicas son paralelas. Se registraron 32 landmarks de la bóveda, la base craneana y la cara en europeos (n = 209) y africanos subsaharianos (n = 92) cuya edad de muerte es de 0 a 19 años. Se analizó separadamente el neurocráneo de la cara. Las coordenadas tridimensionales de cada landmark se analizaron mediante Análisis Generalizado de Procrustes (AGP) y con la información resultante se realizó Análisis de Componentes Principales (ACP). Se obtuvieron los escores del AGP/ACP (que estiman la forma) y el tamaño del centroide (que estima el tamaño de los individuos). Los escores y el tamaño del centroide se analizaron mediante el ajuste no paramétrico de Spline. Los resultados más importantes se obtuvieron en la comparación facial. El cambio de tamaño asociado a la edad no muestra diferencias entre ambas poblaciones. El primer CP resume 31% de la variación y representa principalmente la variación asociada a la edad. Indica que ambas poblaciones divergen en sus trayectorias; la divergencia se produce luego del primer año de vida y se acentúa luego de los 5 años. Las grillas de deformación representan el incremento en altura facial, así como aumento de la proyección nasal. Esos cambios son más importantes en los europeos a lo largo de toda la ontogenia; esto resulta en que los africanos presentan la región interorbitaria más ancha y la cavidad nasal ubicada relativamente más baja respecto de la órbita que los europeos. El segundo CP resume 11% de la variación y representa variación entre ambas poblaciones independientemente de la edad de los individuos. Las grillas de deformación expresan la variación en la parte facial media. Los africanos presentan caras más bajas, prognatismo y cavidades nasales más anchas que los europeos; todos estos rasgos están presentes durante los primeros años de vida. A partir de los resultados, se acepta la hipótesis 1 y se rechaza la hipótesis 2. La diferenciación entre poblaciones resulta de una combinación de mecanismos: divergencia en las trayectorias ontogénicas luego de los 5-6 años de edad, así como del desarrollo de caracteres establecidos durante los primeros 5 años de vida postnatal.