Espíritu y cultura

El hombre, que por los sentidos sólo percibe los datos individuales fenoménicos -"esto coloreado", "esto sonoro", etc.-, por su inteligencia de-vela y aprehende el ser trascendente o trans-subjetivo. En este acto se hace presente una realidad distinta del sujeto y en cuanto dis...

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Detalles Bibliográficos
Autor principal: Derisi, Octavio Nicolás
Formato: Artículo
Lenguaje:Español
Publicado: Pontificia Universidad Católica Argentina. Facultad de Filosofía y Letras 2022
Materias:
Acceso en línea:https://repositorio.uca.edu.ar/handle/123456789/14292
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Descripción
Sumario:El hombre, que por los sentidos sólo percibe los datos individuales fenoménicos -"esto coloreado", "esto sonoro", etc.-, por su inteligencia de-vela y aprehende el ser trascendente o trans-subjetivo. En este acto se hace presente una realidad distinta del sujeto y en cuanto distinta de él: como ob-jectum. En otros términos, el acto intelectivo se manifiesta como intencional, en una dualidad lúcida o consciente del sujeto y objeto, irreductibles el uno al otro, aunque condicionada la aparición del segundo al primero. Por el acto intelectivo, en que el ser del objeto se hace presente en el ser del sujeto, el hombre se adueña del ser de las cosas y simultáneamente del propio ser. Esta aprehensión o presencia consciente del ser trascendente e inmanente, constituye el primer rasgo o manifestación del espíritu: de una actividad esencialmente superior e irreductible a la materia en todos sus grados y manifestaciones. Por ella el hombre trasciende enteramente el mundo de los fenómenos y alcanza la transparencia de la verdad o manifestación del ser -y con ella, la de la dualidad consciente de sujeto y objeto-, que lo coloca por encima de todo el universo corpóreo: únicamente él es dueño del ser, ya que no sólo es sino que sabe que es y sabe que las cosas son...