Recomendaciones para el uso del lenguaje inclusivo en el ámbito de la Administración Pública

El presente trabajo se encuentra motivado en las iniciativas que la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia de la Nación ha realizado en el último tiempo – a partir de sus diversos talleres y capacitaciones-, para promover las contribuciones individuales del personal administrativo de la...

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Detalles Bibliográficos
Autores principales: Lucia Banus; Universidad Nacional de Mar del Plata, Marìa Martina Garra; Universidad Nacional de Mar del Plata
Formato: Artículo revista
Lenguaje:Español
Publicado: Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires 2016
Materias:
Acceso en línea:http://www.cartapacio.edu.ar/ojs/index.php/ctp/article/view/1507
Aporte de:
Descripción
Sumario:El presente trabajo se encuentra motivado en las iniciativas que la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema de Justicia de la Nación ha realizado en el último tiempo – a partir de sus diversos talleres y capacitaciones-, para promover las contribuciones individuales del personal administrativo de la justicia para la incorporación de la perspectiva de género y de conductas que tiendan a la igualdad tanto en la atención al público como en las relaciones interpersonales en el ámbito laboral. Pretende ser una guía práctica y una herramienta que contribuya para que la labor cotidiana que tenemos quienes somos operadoras y operadores de la administración de justicia, pueda –progresivamente- implementar un uso del lenguaje más inclusivo y menos sexista. Como operadoras de la administración pública, entendemos que la comunicación empleada en ese ámbito debe estar dirigida para el reconocimiento y valoración de la diversidad. Asimismo, que el Estado Argentino y sus operaria/os deben comprometerse seriamente a erradicar concepciones, actitudes y prácticas en el uso de lenguaje que justifiquen la superioridad de alguno de los sexos por sobre otro, así como todo tipo de discriminación y exclusión por género, situación socioeconómica, origen étnico, orientación sexual o cualquier otra razón; debiendo darse desde este ámbito una práctica ejemplificadora en el uso y la promoción del lenguaje inclusivo. Partimos de la concepción del carácter sistémico de la discriminación de género, así como de que las elecciones que hacemos al momento de elaborar documentos administrativos que tienen carácter oficial y que, por lo general, comunican disposiciones legales, expresan valores y concepciones acerca de las personas y de la sociedad. Por eso, la presente también es una invitación a reflexionar, desde un enfoque de género, el importante papel que juega el lenguaje en nuestro quehacer dentro del Estado. Así, desde nuestro lugar de trabajo y con las concepciones traídas de la academia, nos preguntamos de qué manera podíamos contribuir a la transversalización del enfoque de género dentro del ámbito de la administración de justicia. Esperamos que estas recomendaciones puedan resultar de utilidad.