Descripción
Sumario:El libro trata un tema cuya importancia contrasta con su escaso estudio. Los efectos negativos de las actividades agrícolas en la calidad del agua han recibido mucha atención en otros países y muy poca en el nuestro. En México, 76% del agua se emplea en la agricultura y el conocimiento de su huella contaminante es escaso. Este libro es resultado de una investigación multidisciplinaria que muestra a la agricultura poco amigable con el agua; que los agricultores tienen una percepción sesgada de su actividad y no reconocen sus efectos en el ambiente; que el gobierno interviene con políticas erróneas estimulando el uso de insumos contaminantes, y que un grupo importante de agricultores realiza prácticas agrícolas poco sustentables. Ante tal panorama, el libro aporta información sobre este problema en una importante región agrícola; propone algunas medidas e instrumentos para minimizarlo; cubre un vacío en la investigación y la información y espera que motive estudios similares en otras regiones del país.